Cinco experimentos con naturaleza para niños
La naturaleza ofrece un escenario natural perfecto para disfrutar de salidas familiares llenas de diversión y juegos educativos. Además de brindar la oportunidad de ser auténticos exploradores, también permite profundizar en la comprensión del funcionamiento de la naturaleza a través de pequeñas experiencias. Con las sugerencias que encontrarás en este artículo, tú y tus hijos podréis descubrir lo interesante que es aproximarse a la naturaleza. Lo mejor de todo es que estos experimentos no requieren una preparación complicada y se basan principalmente en el uso de materiales que se encuentran de forma natural en el entorno.
1. Crea un mini ecosistema.
Crear un mini ecosistema en un bote, también conocido como terrario, es una actividad educativa y entretenida que permite observar cómo funciona un ecosistema en pequeña escala. Aquí tienes los pasos para hacerlo y algunos de los beneficios:
Necesitarás:
Un recipiente transparente con tapa (como un frasco de vidrio o un recipiente de plástico con tapa)
Grava o piedras pequeñas
Carbón activado (opcional, pero ayuda a mantener el aire fresco)
Tierra para macetas
Plantas pequeñas (musgo, helechos, suculentas, etc.)
Agua
Elementos decorativos (rocas, conchas, figuras pequeñas)
Pasos:
Lava y seca bien el recipiente transparente.
Coloca una capa de grava o piedras pequeñas en la parte inferior del bote para ayudar en el drenaje del agua. Si deseas, agrega una capa delgada de carbón activado sobre las piedras para ayudar a mantener el aire limpio.
Agrega una capa de tierra para macetas sobre la capa de grava. La tierra debe ser lo suficientemente profunda para que las raíces de las plantas puedan crecer.
Planta las plantas en la tierra, dejando espacio suficiente entre ellas. Puedes usar pinzas o utensilios largos para ayudarte a colocarlas en el lugar deseado.
Riega el mini ecosistema cuidadosamente, asegurándote de no empapar el sustrato.
Decora el mini ecosistema con elementos decorativos, como rocas, conchas o figuras pequeñas.
Cierra el recipiente con la tapa.
2. Haz bombas de semillas.
Hacer bombas de semillas es fácil y resulta muy útil para fomentar la biodiversidad de tu jardín. Necesitarás semillas, abono y arcilla. Haz una mezcla de estos tres ingredientes en seco y, después, ve añadiendo agua hasta conformar una masa, como la de una pizza. Haz bolas y déjalas secar al sol. Una vez estén secas, ya las puedes usar para reverdecer tu balcón, tu barrio, una rotonda o el patio de la escuela.
Las bombas de semillas están creadas por Masanobu Fukuoka, las llamó Nendo Dango y es una manera muy divertida de plantar.
En la tienda de Bridepalla encontrarás un kit ya preparado con todos los materiales e instrucciones para hacer tus propias seedbombs en casa.
3. Collage con flores y hojas prensadas
Una sencilla actividad es prensar hojas y flores. Recolecta aquellos elementos vegetales que te gusten y ponlos durante varios días (o semanas) bajo una buena pila de libros, protegiéndolas con papel de diario. Cuando estén secas y planas, podrás utilizarlas para hacer composiciones tan hermosas como las de Helen Ahpornisiri.
4. Experimenta la cianotipia.
La cianotipia es un antiguo proceso fotográfico de impresión que utiliza productos químicos sensibles a la luz para crear imágenes de color azul o cian. Fue inventada en el siglo XIX por el astrónomo y científico británico Sir John Herschel, pero se popularizó gracias a la fotógrafa Anna Atkins, quien lo utilizó para producir libros de botánica ilustrados con fotografías cianotipias de algas marinas y plantas.
El proceso de cianotipia implica los siguientes pasos:
Preparación de la solución química: Se prepara una solución de cianuro de amonio y ferricianuro de potasio. Estos químicos son sensibles a la luz ultravioleta y se combinan para formar cristales de ferrocianuro de hierro, que son insolubles en agua.
Revestimiento del papel: Se aplica esta solución química sobre un soporte de papel, tela u otro material absorbente. El soporte debe secarse en la oscuridad para evitar que la exposición a la luz ultravioleta comience antes de lo deseado.
Exposición a la luz: Se coloca un objeto o una imagen transparente sobre el papel tratado químicamente y se exponen ambos a la luz solar o a una fuente de luz ultravioleta. La luz atraviesa las áreas no cubiertas por el objeto o la imagen, mientras que las áreas cubiertas quedan protegidas de la luz.
Enjuague y revelado: Después de la exposición, el papel se enjuaga en agua, lo que provoca la reacción química en las áreas expuestas a la luz. Las áreas expuestas se vuelven de color azul cian debido a la formación de ferrocianuro de hierro, mientras que las áreas no expuestas permanecen blancas.
La cianotipia es conocida por su tono azul característico y su aspecto distintivo. Es un proceso fotográfico alternativo y artístico que a menudo se utiliza para crear imágenes artísticas y experimentales en lugar de fotografías tradicionales en blanco y negro o en color. También es apreciado por su simplicidad y su capacidad para producir imágenes de gran contraste. Hoy en día, la cianotipia se sigue utilizando en la fotografía artística y se ha convertido en una forma de expresión creativa en el campo de las artes visuales.
En Bridepalla tenemos un kit para experimentar con la cianotipia de manera fácil y muy explicativa. Usa nuestra tienda para hacer un buen regalo.
5. Haz una cabaña.
Si hay una cosa que tenemos clara es que nuestra experimentación con la naturaleza en la infancia ha determinado nuestro ser adulto. Hacer cabañas en los árboles o en el bosque es una actividad por la que todos los niños deberían pasar.
Fomenta la creatividad y la resolución de problemas: Planificar y construir una cabaña en un árbol implica creatividad y resolución de problemas. Los participantes deben diseñar la estructura, reunir materiales y superar obstáculos técnicos, lo que estimula el pensamiento crítico y la creatividad.
La construcción de cabañas en los árboles implica el uso de herramientas y técnicas de construcción. Los participantes pueden aprender habilidades prácticas, como el uso seguro de herramientas, medición y carpintería básica.
Pasar tiempo en un entorno natural, en lo alto de los árboles, permite a las personas conectarse más profundamente con la naturaleza y desarrollar un mayor aprecio por el medio ambiente.
Superar desafíos al construir y habitar una cabaña en el árbol puede aumentar la confianza en las propias habilidades y fortalecer la autoestima. Los participantes pueden experimentar una sensación de logro al completar la cabaña.
La construcción de cabañas en los árboles a menudo requiere trabajo en equipo. Los participantes deben colaborar, comunicarse y asignar tareas para lograr un objetivo común, lo que fomenta habilidades de trabajo en equipo y liderazgo.
Al estar en estrecho contacto con la naturaleza y la vida silvestre, las personas pueden aprender sobre la ecología, la biodiversidad y la interacción entre las especies. Esto puede llevar a una mayor conciencia ambiental.
Pasar tiempo en una cabaña en el árbol a menudo implica cierto grado de independencia y autonomía. Los participantes deben tomar decisiones, cuidar de sí mismos y aprender a adaptarse a situaciones cambiantes.
La construcción y el mantenimiento de una cabaña en el árbol requieren planificación y organización. Esto puede ser una oportunidad para desarrollar habilidades en estas áreas.
Superar los desafíos y dificultades que surgen durante la construcción y el mantenimiento de una cabaña en el árbol puede fomentar la perseverancia y la determinación.
En resumen, las cabañas en los árboles ofrecen un entorno único para el aprendizaje y el crecimiento personal. Estas experiencias pedagógicas pueden ser especialmente valiosas para niños y jóvenes, pero también pueden beneficiar a personas de todas las edades al promover la educación al aire libre, la resolución de problemas, la conciencia ambiental y el desarrollo de habilidades sociales y personales.